El Ironman 70.3 de Saint George vivió una jornada trágica con la muerte de uno de los 2.500 participantes cuando participaba en el segmento de natación. El triatleta se sintió mal, pidió ayuda y fue atendido rápidamente pero tras intentar reanimarle, falleció a los pocos minutos.
Sin embargo, la tragedia podría haber sido aún mayor debido a otro incidente en el segmento de ciclismo. Un triatleta cayó de su bicicleta y tras la caída se quedó completamente inmóvil. Varios triatletas que pasaron junto a él se pararon inmediatamente para comprobar qué ocurría y comprobaron que la situación era preocupante.
El triatleta había sufrido un ataque al corazón mientras pedaleaba y la rápida reacción de otros competidor que comenzó rápidamente acciones de reanimación y permitió mantener con vida a su compañero de fatigas hasta la llegada en pocos minutos de los servicios de emergencia de la prueba le salvaron la vida.
Una vez conseguido que el corazón volviera a activarse , el triatleta fue trasladado a un hospital de la ciudad de Utah y quedó ingresado en observación.
En el triatlón el segmento de natación es el más peligroso y el que registra el 90% de los fallecimientos en competición. Sin embargo, en la bicicleta los accidentes fatales tienen más que ver con golpes que con problemas cardiacos como en el caso del competidor del Ironman 70.3 de St George. En este caso el triatleta que sufrió la parada cardiorespiratoria tuvo la suerte de ser atendido en menos de un minuto y consiguió salvar la vida en una jornada dramática con una muerte que, por suerte, no se amplió a dos.
Fuente: Diario del Triatlon.