Este fin de semana regresó la actividad oficial del Stand Up Paddle al país. El Campeonato Nacional organizado por la Asociación Argentina de Surf había empezado en el verano, luego por las restricciones que impuso la pandemia se detuvo hasta que en Paraná se concretó el regreso.
La capital provincial, junto a Rosario y Concordia, conforman el trío de fechas de la denominada “Triple Corona del Litoral”. Sí, el Nacional de SUP tendrá su actividad oficial el 25 y 26 de septiembre en Concordia, el lugar en el mundo de Diana Conti.
“Estamos en Las Garzas, guardería náutica, frente al lago en un divino paisaje y el agua en óptimas condiciones para practicar el stand up paddle”, dice a modo de presentación tras bajarse de su tabla, en una bahía del embalse de Salto Grande. Ella sabe de lo que habla: al deporte lo conoció casi por casualidad cuando pasó un tiempo en Palma de Mallorca, España.
Desde entonces, no dudó: “El lago de Salto Grande, tremendo espejo de agua plana, para el stand up paddle está bueno. En otros lados, como el mar, se practica el sub surf pero en este caso nosotros tenemos el privilegio de tener agua plana, tranquila. O sea, se pueden practicar distancias largas o sprint. Es un placer tener este lago para practicar el SUP”.
Y no sólo empezó a practicarlo sino que también a enseñarlo. Hoy es instructora certificada por la Asociación Argentina de Surf. Es por eso que, frecuentemente, pueden verla remándola en la zona de la costanera de Concordia, en el río Uruguay; o en otras playas como “Punta Viracho”, también en el lago. No para, es intensa y siempre dirá lo mismo: “¿Qué más se puede pedir en nuestra ciudad que lo tenemos así que es imposible no tentarte?”, pregunta sonriendo.
Enseñar lo que se ama
– Sos docente de formación pero transmitir el conocimiento de algo que te gusta y practicarlo es distinto. ¿Cómo es la experiencia de enseñar?
-Soy docente, maestra jardinera, pero hace unos años encontré en el stand up paddle mi combo perfecto porque me gusta el sol, el agua, la vida al aire libre y me gusta practicar algún deporte, hacer gimnasia. Con el stand up paddle encontré todo. Por eso soy instructora. Uno de mis sueños, de mis objetivos, fue que la gente conozca el SUP y que en Concordia haya muchos supistas.
-Por eso te ocupás especialmente de que los más chicos se suban a la tabla.
-Exacto. Los peques, como les digo yo, que son la categoría SUP Kids, son los que más se enganchan. Se suben a la tabla y no se quieren bajar. Le agarran muy rápido el timing y disfrutan mucho remando. Ellos son el semillero, los futuros raiders campeones. Ahí es a donde apunto: a los chicos.
-¿Y qué pasa con el resto de la familia?
-También las mamis se terminan enganchando porque vienen los papás a traer a los niños y también quieren probar y les gusta. Es un deporte fácil, que cualquier persona puede practicar, sea un niño de corta edad o una persona mayor, sin tanto entrenamiento físico porque no tienen impacto. Si caes, es al agua.
-Siendo una actividad náutica vinculada al agua, en el caso de los más chicos se piensa en seguridad. ¿Qué respondés a eso: cuáles son las medidas de cuidado?
-Exacto. No todos los niños que vienen saben nadar y algunos tienen más miedo, otros no tanto pero todos salen con el chaleco salvavidas y el uso del glitch que es una medida de seguridad obligatoria. Normalmente practicamos en la orilla con los niños porque dan pie, además salimos de rodilla, luego se ponen de pie y la verdad que les encanta. Siempre lo hacen supervisados por un profe.
“Nunca bajo los brazos”
-¿Antes de enseñar, cómo fueron las primeras experiencias, las primeras caídas incluso?
-Sí (ríe). La primera vez que probé una tabla fue en España, en Mallorca. Fue como algo recreativo: dije qué divino estar remando en ese mar turquesa, estar parados sobre el agua, es increíble. Después, me puse a buscar escuelas en el país, encontré SUP Paraná (saludos a Francisco Giusti, de la Playa Municipal) y empecé a anotarme en carreras. Me compré una tabla y, con poca experiencia, entrené y corrí. Los resultados me motivaron a seguir: empecé a meter podios. Me empecé a embalar.
-¿Cómo eran esas primeras veces: cargabas la tabla en el auto y te ibas?
-Cargaba mi tabla inflable en el baúl, llegaba, la inflaba y me tiraba a entrenar. Remaba y remaba, probaba giros y después llamé a gente de Buenos Aires y Uruguay que me enseñaron a tener un poco más de performance en la remada y en los giros. Me involucré más en las carreras. Empecé en la Copa del Litoral, después un Argentino y así fue que me involucré en el deporte que me apasionó. Fue un amor a primera vista, mi cable a tierra o cable al agua.
-¿Desde el momento que arrancaste a la fecha, hubo algún momento en que dijiste: no, esto no es lo mío? ¿O siempre encontraste motivos para seguir?
-No, no. Nunca bajo los brazos, ni siquiera en una carrera cuando no doy más, cuando no tengo más aire, ni brazos. Nunca bajé los brazos. Al contrario, quiero seguir cada vez más y que cada vez más gente se involucre y se sume.
-¿Los familias, los amigos se involucraban, te seguían?
-Sí, empecé a invitar a amigas, a gente conocida que venga a probar porque lo más lindo del deporte es difundirlo, transmitirlo y remar juntos. Remar solos, no. Me gustaba más la idea de que la gente se entere lo lindo que es. Entonces, uno de mis sueños fue este de poder transmitirlo, difundirlo y hoy en Concordia somos una cantidad de tablas. Así que, poco a poco, motivando, incentivando, invitando a la gente que se sube a la tabla y que pruebe, hoy somos un montón en Concordia.
-Condiciones climáticas y naturales no faltan claramente.
-En Concordia tenemos la maravilla del Lago de Salto Grande o el río, la costanera, en cualquier espejo de agua se puede practicar así que imposible no tentarse con lo que tenemos en nuestra ciudad.
El Nacional en Concordia
-Hay un camino más claro de salida de la pandemia que frenó muchas actividades. ¿Qué pasó con el SUP en todo este tiempo?
-En cuanto a las carreras, se suspendió todo. No se podía hacer ningún evento masivo, eso estuvo todo parado. Tampoco hubo muchos entrenamientos porque no lo permitían pero ahora se nos viene el Argentino así que estamos súper entusiasmados. Vendrán a Concordia: tenemos la fecha 25 y 26 de septiembre, acá en nuestro lago de Salto Grande.
-¿Qué hay que saber del Nacional?
-Que las categorías son diferentes, de acuerdo a la edad. Por ejemplo, SUP Kids son los niños que corren una distancia de 500 metros; después tenés una categoría Participativa de 1 kilómetro o 1 y medio. Además, tenés categoría All Run que se corren 4 kilómetros. Después pasás a Maratón, la elite corre 15 kilómetros. También hay una distancia sprint de 200 metros, a máxima velocidad con dos boyas de punta a punta.
Vienen raiders de distintas partes del país: Paraná, Rosario, Bariloche, Mar del Plata y de todas las escuelas del país.
-¿Qué significa que Concordia sea sede de un Argentino?
-Estamos con la vara muy alta. Concordia tiene de todo como para poder recibir corredores. Más que felices de que Concordia se caracterice por un Argentino de SUP que es un deporte relativamente nuevo en nuestra ciudad pero ya es la segunda fecha de un Nacional.
Diana quiere volver al agua, invita a subirse a la tabla. Lo hace varias veces y antes deja una invitación: “el SUP ES un deporte fácil, sencillo, que cualquier persona lo puede practicar. No tiene impacto y la sensación de estar parado sobre la tabla es inigualable. Naturaleza, vida simple, aire libre. Qué más se puede pedir en nuestra ciudad que lo tenemos así que es imposible no tentarte. Podés meterle intensidad, entrenamiento fuerte o también paseando, tranquilo con tu perro o un niño. Es muy relajante remar. Están invitados a sumarse a SUP Concordia”.
Fuente: “3200, el código del deporte”.